26 de agosto de 2013

2013 - 11° - SPA - CORRIENDO COMO NUNCA...


...y perdiendo como siempre. Este podría ser el resumen del GP de Belgica para Fernando Alonso. Las buenas noticias son que Ferrari parece haber reaccionado, y las malas que Red Bull sigue teniendo un misil inalcanzable. Empezamos por el sábado, con un error de Alonso en Q3 haciendo un trompo que no tendría trascendencia porque el circuito se estaba secando y su vuelta mas rápida sería la segunda. El otro error de la crono fué estratégico. Ferrari sacó los dos coches a pista demasiado tarde en Q3 y esto impidió que pudieran dar una tercera vuelta. Hamilton, Vettel y Rosberg dieron una vuelta mas y quedaron en las tres primeras posiciones porque el circuito se estaba secando. Al final Alonso noveno y Massa décimo. Los dos Ferrari en las últimas posiciones de Q3 a pesar de que un primer y segundo puesto de Alonso en Q1 y Q2 nos hacía pensar que el Ferrari había mejorado en su punto más débil. Veremos que pasa en la crono de Monza si se disputa en seco.
Mal empezaba el gran premio de Bélgica para el equipo rosso. La victoria estaba descartada e incluso el podio parecía fuera del alcance del asturiano. Para colmo de males la meteorología le negaba la posibilidad de pescar a río revuelto y la carrera comenzaba en seco. Alonso salió bien como acostumbra, frenada muy justa por el interior de la curva uno y caían los dos Lotus y el Force India de Di Resta. En la bajada se empareja con canguro Mark. Llega Eau Rouge: Frena tu que a mi me da la risa. Pasada escalofriante muy parecida a la que le hizo el año pasado Raikkonen al Kaiser. Ya estaba quinto. Cuatro vueltas mas tarde caía el McLaren de Button y otras dos después el Mercedes de Rosberg. De noveno en parrilla al podio en sólo seis vueltas. Increíble. Todavía adelantaría a Hamilton unas vueltas mas tarde para finalizar una remontada del noveno al segundo puesto ganando los siete puestos con adelantamientos en pista. Otro cantar sería el asalto a la primera posición del alemán. Vettel adelantó a Hamilton en la primera vuelta sin DRS como si estuviera parado, y a partir de ahí impuso un ritmo cómodo para él, pero inalcanzable para todos los demás, incluido Alonso. Con medios gastados, Fernando se acercaba al ritmo de Vettel, pero en la primera parte de cada stint, el alemán le metía tres décimas por vuelta. Con duros la cosa era aún peor por la increíble facilidad que tiene la máquina de Newey para calentar las gomas. Dos datos que dan miedo: Con estas gomas Vettel marcó el record del tercer parcial en su vuelta de salida de boxes y la vuelta rápida de carrera hasta ese momento en la segunda. Es decir, calienta en unas pocas curvas lo que a otros les cuesta vuelta y media. Cuando Alonso entró a hacer su segunda parada estaba a diez segundos de Vettel. En Red Bull tuvieron un error que les podía haber salido caro. No mandaron entrar a Frigodedo inmediatamente para cubrir posición. Si llega a salir un safety, les hubiera costado la carrera. En vez de eso solo les costó tres segundos, pero van tan sobrados de coche que les da igual. Cuando el alemán se incorporó a pista tenía a Alonso a siete segundos y en meta le metió diecisiete. Diez segundos en trece vueltas. Y sin sudar porque le podía haber metido veinte si hubiese querido. Así de superior es este coche. Con esta diferencia de ritmo no creo que Alonso hubiese podido ganar la carrera ni saliendo desde la pole. Ayer fué el segundo coche con mas ritmo en pista, muy por encima de Mercedes y Lotus que en Hungría parecían inalcanzables. El coche parece que ha mejorado también el sábado, así que es justo reconocer que en Ferrari están espabilando. El problema es que ya es tarde porque el piloto que va por delante de Fernando en la clasificación, sigue teniendo un coche muy superior y la distancia es ya de casi dos carreras. Aunque Alonso tuviera un coche para quedar justo por delante de Vettel en todas las carreras, que no lo tiene, el mundial está perdido si el alemán no tiene algún problema adicional.
A Alonso y a todo el equipo les toca ahora remar para ganar en la pista lo que Montezemolo perdió en los despachos permitiendo a Red Bull volver a los neumáticos del año pasado. Si, aquellos de los que ya casi no nos acordamos, que el Ferrari cuidaba como ninguno y que a Red Bull le dieron tantos dolores de cabeza en la primera parte de la temporada. Aquellos. Alonso no tira la toalla, por lo menos de cara a la galería y dice que en Monza le gustaría darnos una alegría. Veremos.

Nos vemos en las carreras.