También es mala pata que pise el cajón por primera vez en año y medio, precisamente donde no hay champán en el podio. Y sobre todo tiene bemoles que el pobre Kimi no pueda celebrarlo como es debido por culpa del amigo imaginario de los organizadores del sarao, pero ese ya es otro tema que daría para un post entero y no es plan, así que a lo nuestro.
Tercer recital de Hamilton en cuatro carreras. Salvo la "victoria" ejem, ejem... de Vettel en Malasia, no ha tenido rival en este inicio de temporada. El único que podría hacerle sombra es su compañero y parece que no está por la labor este año.
Nadie sabe que fué de aquel piloto que, en la primera mitad de 2014, ganaba a Lewis una crono detrás de otra. En los sábados de este 2015 mas bién se está echando una siesta detrás de otra, aunque en una postura un pelín rara como se puede comprobar en esta imagen;
Problemas que también tuvo Hamilton, que no sabía que hacer para refrigerar los discos en las últimas vueltas, y circulaba como alguno que yo me sé en las fiestas de mi pueblo: De lao a lao y haciendo eses.
Hamilton, Raikkonen, Rosberg. Este fué el podio final. Y ahora es donde vosotros os preguntáis por donde andaba el nuevo Kaiser, el ídolo de Maranello, el gran tetracampeón...
Bueno, ya vale que parezco un periodista italiano. Pues nuestro querido frigodedo andaba por el quinto puesto haciendo el ridi como en sus mejores momentos de 2014. Varias pasadas de frenada, en una de ellas casi se lleva puesto a Massa, y dos salidas de pista absurdas, la última con parada y cambio de alerón incluido. Hoy no tenía el día, y eso que su coche va cada vez mejor. Es increíble lo bien que trata el Ferrari las gomas blandas. En el onboard las delanteras se veían como nuevas después de veinte vueltas intentando cazar a Bottas.
No entiendo como se puede pasar de hacer tres carreras casi perfectas, a hacer el desastre de hoy de un día para otro. En fin.
Vamos con los nuestros:
Mehri empieza a estar hasta los pistones del desastre de equipo que le ha tocado en suerte para debutar en la Fórmula 1. Hoy ha acabado a una vuelta de su compañero de equipo y ha dado una colleja a su equipo por que le han dado el coche de Pierre nodoyuna.
Carlos Sainz ha vuelto a abandonar por avería, igual que Verstappen. Una pena porque el sábado se había marcado un vueltón para entrar en la Q3 y calificar noveno.
Alonso calificó decimocuarto y acabó undécimo. McLaren sigue progresando, por lo menos con un coche porque Button abandonó en la crono y hoy no pudo ni tomar la salida. Hoy Alonso se quedó a un puesto de los puntos y acabó por delante de los dos Sauber que montan motor Ferrari.
El sábado Fernando consiguió entrar en Q2. Primera de un McLaren esta temporada. Ahora el objetivo para Barcelona, en donde llegarán cosas nuevas, es poder entrar ya en Q3 y meterse en el grupo de mitad de tabla con Toro Rosso y Red Bull.
Unos Red Bull que este año están irreconocibles. Un dato escalofriante: Después de la carrera Horner confirmaba en la BBC que el Richi ¡va a estrenar su último motor del año en Barcelona! Cuatro motores en cinco carreras, que se dice pronto. Creo que nadie se esperaba este desastre del equipo que dominó la Fórmula 1 durante cuatro años, y que el año pasado tenía el segundo mejor coche de la parrilla.
Otro equipo que ha pegado un bajón considerable es Williams. Hoy Bottas ha hecho cuarto gracias a las cagadas de Vettel, pero a 42 segundos de Hamilton. De todas maneras me huelo que, como Ferrari siga acercándose a los Mercedes, a estos no les va a quedar mas remedio que darle al equipo del bueno de Sir Frank el motor de verdad para ver si incordian a los de rojo.
No quiero despedir el post sin hablar de la polémica que al parecer se desató después de que Hamilton hiciera algo tan disparatado y tan fuera de lugar como mojar con champán a una azafata en el podio del Gran Premio de China, cosa que nunca había pasado en la historia de este deporte. Nótese el tono irónico del asunto. Vamos a ver, mis queridos gilipollas y gilipollos: En los podios de las carreras se moja a la gente. A los mecánicos, a los ingenieros, a las azafatas, al público y al ministro que entrega el premio como se descuide. Lleva haciéndose desde hace cincuenta años, y no hay ningún motivo para dejar de hacerlo. Y al que no le guste, que apague la tele, pero que no incordie con tontunas de "ataques machistas" y chorradas por el estilo, que estamos hablando de celebrar una victoria tirando champán al personal, no dándole collejas. A base de hacer caso a los profetas de lo políticamente correcto acabaremos volviéndonos todos tan imbéciles como ellos.
Próxima parada Montmeló. Dicen que este es el circuito que mejor da la medida de los coches, así que veremos si Ferrari puede acercarse lo suficiente a Mercedes como para darles guerra. Aunque me da que si los alemanes no tienen problemas de frenos como hoy, o cualquier percance, lo van a tener difícil.
Nos vemos en las carreras.
